La cama de un perro es mucho más que su lugar de descanso. También es su refugio y la ubicación que puede identificar como realmente propia dentro del hogar. Por eso es necesario que en una casa siempre exista una cama y que además se adapte a la perfección a nuestro amigo peludo.
Para comprar una cama para tu perro debes tener en cuenta una serie de aspectos. Cuanto más cómodo se encuentre el can más usará su cama. En este artículo te vamos a dar los mejores consejos para que encuentres la opción perfecta para su descanso.
Elige el tamaño correcto
Puede parecer algo evidente y seguro que pecas por comprar una cama para tu perro de mayor tamaño para curarte en salud. Por lo menos debe ser igual de larga que tu mascota. Si quieres que tenga suficiente sitio para estirarse tienes que añadir 30 centímetros. Así que lo perfecto es que saques el metro para medir al dogo y encontrar la medida más ajustada.
También debes tener en cuenta el espacio elegido para colocar la cama de tu perro. Debe ser un lugar accesible y suficientemente ventilado. Lo ideal es colocarlo en una zona cercana al sofá o lugar de reunión de tu hogar. También te debes asegurar que sea lo bastante tranquilo para cuando el can busque momentos de relajación con más privacidad.
Comprueba cómo duerme tu mascota
Además del tamaño de tu amigo peludo, para comprar una cama para tu perro es importante que veas la manera en la que duerme. Es habitual que los perros grandes duerman totalmente estirados por lo que es preferible para ellos un colchón rectangular totalmente plano.
Los perros más pequeños suelen dormir enroscados y disfrutarán del mejor descanso en una cama circular con rebordes. Ese gesto de enroscarse tan característico de tu colega peludo se facilitará si adquieres un lugar para su descanso con estas características. Así que si aún no sabes como descansa tu perro puedes observarlo para comprobarlo.
Los materiales siempre son importantes
Este es uno de los principales aspectos que debes cuidar a la hora de comprar una cama para tu perro. Deben garantizar la comodidad de la mascota y además deben ser de calidad para seguir su ritmo sin romperse o estropearse. Por supuesto, es imprescindible que el tejido con el que esté fabricada sea fácilmente lavable. También es buena idea que sea reversible para que se pueda usar por los dos lados.
Una de las partes más importantes es el relleno de la cama. Para perros grandes debe ofrecer la suficiente dureza para aguantar su peso. La espuma o la fibra son los materiales más usados, aunque también puedes encontrar algunas que están rellenas de algodón.
Si tu perro tiene más edad o sufre de alguna dolencia articular deberás pensar en alguna opción con características ortopédicas. Existen en el mercado camas con relleno viscoelástico que les puede servir de alivio y ayuda a conseguir un descanso más efectivo.
El último aspecto para tener en cuenta es el clima para comprar la cama de tu perro. Si va a sufrir temperaturas elevadas es conveniente elegir materiales que no transmiten calor como la tela de la malla o la seda fría. Para climas más fríos se puede usar la felpa que ayuda a combatir las altas temperaturas.
Esto es todo lo que tienes que saber para comprar la cama para tu perro. Recuerda siempre consultar con los especialistas para conocer las mejores opciones. De esta manera conseguirás el lugar de descanso ideal para tu amigo de cuatro patas.